Vendajes funcionales

El vendaje funcional es un tipo de inmovilización parcial, que se caracteriza por permitir una cierta movilidad funcional frente a las inmovilizaciones totales. Se utiliza en patologías ligamentosas, tendinosas y musculares. El vendaje funcional tiene la ventaja de evitar los efectos secundarios que las inmovilizaciones totales conllevan.

Los vendajes funcionales pueden tener fines tanto terapéuticos como preventivos.
Serán preventivos en el caso de realizar el vendaje sin que exista previamente una lesión pero tratando de minimizar el riesgo de padecerla. En el caso de ser vendajes terapéuticos, son vendajes destinados a aliviar una patología concreta, minimizando el dolor y el riesgo de que esta patología se agrave, pero permitiendo que el sujeto practique sus actividades de la vida diaria con la mayor normalidad posible.

El vendaje debe hacerse con mucho cuidado, evitando arrugas, protegiendo adecuadamente las zonas delicadas y asegurándose de que está adaptado para la persona a la que se realiza. El vendaje se cambiará dependiendo de las necesidades, pudiendo ser cada varios días si es una persona que no realiza una actividad muy dura, o cambiarlo cada poco tiempo en el caso de un deportista