Los primeros auxilios son básicos ante cualquier accidente físico. En este artículo vamos a recoger brevemente algunos consejos sobre cómo tratar las lesiones deportivas.

 

Las principales lesiones deportivas tienen que ver con los músculos, ligamentos y huesos. Los esguinces, los desgarros musculares, las fracturas óseas y las dislocaciones son los problemas más habituales a los que se enfrenta cualquier deportista. Si notas algún dolor mientras haces deporte, párate y pide ayuda.

 

El protocolo PRICE es una técnica para realizar las medidas de primeros auxilios que deben tomarse ante una lesión deportiva:

 

  1. La protección de la zona dañada para evitar el agravamiento de la lesión y la aparición de otras derivadas. Para ello puedes inmovilizar la zona.
  2. El reposo para ayudar a estabilizar la zona. En la medida de lo posible siéntate o túmbate en el suelo mientras pides ayuda para que alguien te lleve a casa o a urgencias.
  3. La aplicación de hielo actúa como analgésico y tiene efecto antiinflamatorio si se aplica durante al menos 20 minutos cada 3 ó 4 horas.
  4. La elevación de la parte del cuerpo afectada, especialmente de las extremidades distales, ayuda a reducir la inflamación mediante el retorno de la sangre.