Tratamientos de ciática
La ciática (también neuritis ciática, ciatalgia o lumbociática) es un conjunto de síntomas entre los cuales destaca el dolor en el territorio del recorrido del nervio ciático, que puede estar acompañado de alteraciones en la función neurológica local.
Entre sus causas está la compresión general o irritación de una de las cinco raíces de los nervios espinales que dan origen a cada nervio ciático, o por la compresión o irritación de la izquierda o hacia la derecha o ambos nervios ciáticos. El dolor se siente en la zona lumbar, glúteos, o diversas partes de la pierna y el pie. Además del dolor puede haber entumecimiento, debilidad muscular, hormigueo o sensación de hormigueo, sensación de ardor y dificultad en el movimiento o el control de la pierna. Típicamente, los síntomas sólo se sienten en un lado del cuerpo.
El dolor de la ciática puede variar desde infrecuente e irritante hasta constante y debilitador. Los síntomas específicos de la ciática también varían mucho en cuanto al lugar afectado y su gravedad; todo depende de la afección causante de la ciática. Aunque los síntomas pueden ser muy dolorosos, rara vez producen daños permanentes (daño tisular) en el nervio ciático.
El tratamiento fisioterápico para esta patología puede ser: analgésico en un primer momento con: onda corta, electroanalgesia, láser; masoterapia, liberación miofascial, punción seca en musculatura que puede estar implicada en el pinzamiento del nervio como por ejemplo psoas-iliaco, glúteo mayor, medio y menor, piramidal, cuadrado lumbar; estiramientos de esta musculatura implicada; realización de movilizaciones neurales para mejorar el deslizamiento de los nervios sobre los tejidos circundantes, reeducación postural global; ejercicios hipopresivos (fortalecimiento de abdomen para evitar recidivas); pautar ejercicio para potenciaraeróbico de bajo impacto como la piscina, con el agua conseguimos disminuir el efecto de la gravedad por lo que podremos trabajar en rangos de movimientos más amplios sin dolor.