El cólico del lactante se caracteriza por una crisis de llanto con enrojecimiento, que aparecen de repente en un niño completamente sano, los síntomas más característicos son: distensión o hinchazón de estómago, levanta las rodillas hasta la altura de la tripa, vómitos y reflujo, trastorno del sueño, irritabilidad y estreñimiento.

Comienzan en el primer mes de vida, tienen el pico en los dos meses y se resuelven en el cuarto o quinto mes.

¿Porque se producen? por una inmadurez del sistema digestivo y del sistema nervioso unido a tensiones en el tórax, columna vertebral, base del cráneo y primeras cervicales del bebé, estas disfunciones provocan que la leche materna no se digiera bien, fermente y genere más gas.

¿Como ayuda a la fisioterapia? primero se evalúan las zonas donde el bebé presenta tensión y se aplican técnicas muy suaves y precisas para eliminar dicha tensión. Se hace especial hincapié en la cabeza, que fue sometida a grandes presiones durante el parto, el diafragma, para permitir la expulsión del gas y de esa manera, relajar el estómago y el intestino, relajando los músculos de su pared y calmando así su irritación. A los padres se les enseña unos ejercicios muy sencillos y masajes, a modo complementario, para realizar en casa.

En un plazo de 2-3 semanas como máximo un mes, los cólicos han desaparecido y el bebé vuelve a estar feliz y relajado